viernes, 3 de mayo de 2013

Dudemos

Antes todo tenía una respuesta, era fácil decidir qué hacer y qué no hacer. Pero siempre se llega a la duda, de eso vivimos, esa es la esencia. Es lo que no hace sentir vivos, como decía Descartes. De lo único que no podemos dudar es de que dudamos, eso nos da la certeza de que estamos pensando, y por lo tanto de que existimos.
Dudar me hace sentir viva, aunque a veces lleve las cosas a extremos peligrosos. Aunque a veces quiera volver a ese "estado de reposo" en el cual estoy segura de lo que quiero. Aunque esté en cierta forma "traicionando" mis ideales.
La cosa es que me gusta, me gusta no saber que hacer, aunque suene tonto. Esa incertidumbre es emocionante. El no saber que va a pasar, a dónde vamos a llegar. Aunque pensándolo bien nunca lo sabemos. Creemos que lo hacemos, pero no podemos predecir cuándo y por qué vamos a dudar, a llegar ese "no saber que hacer".
Me había olvidado lo que era esa emoción. Me olvido de esas sensaciones demasiado fácil.

No hay comentarios:

Publicar un comentario