Los dias pasaban lento, al ritmo en que las hojas de los arboles se ponian amarillas y empezaban a caer. La lluvia empezaba a parar y todo, todo, todo, se secaba. El sol había dejado de calentar las veredas y los grillos ya no cantaban como en las noches de verano. No habia mas remedio, y mientras el cielo iba dejando su color azul y el frio empezaba a atacar cada punto de la ciudad y del cuerpo; veia como el tiempo pasaba cada vez mas rapido, y yo sin poder hacer nada.
Me dolia en el pecho cuando me quedaba sola, yo sabia que en realidad no estaba sola, pero sentir frio sin tener a quien abrazar no es lindo. Si, quizas era una exagerada, pero si no sentiste que extrañas a alguien cuando no pasaron mas que minutos desde que estuvieron juntos, entonces no sabes lo que se siente.
Por primera vez no podia identificar que era lo que sentia, no era que lo hubiera tenido completamente claro en algun momento, pero ahora no sabia si estaba feliz o triste, en guerra o en paz. Dentro de mi cabeza pensamientos encontrados se enfrentaban. Cuando hay que tomar decisiones mis ideas se desordenan y surgen las incognitas que todavia no tengo resueltas. Asi no es facil decidir. Asi no es facil darse cuenta que es lo que conviene hacer.
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